El mundo del packaging y las etiquetas está avanzando mucho en los últimos años. En un mercado cada vez más competitivo, las empresas entienden que el envasado de un producto es un elemento fundamental de marketing, que permite diferenciar sus productos de los de la competencia en el punto de venta. Por eso ya no vale con diseñar envases y etiquetas de calidad: hay que entrar por los ojos de los consumidores, pero también conectar con sus valores. En este artículo repasamos las tendencias que van a marcar este 2018:
- Cuidado del medio ambiente: llevamos tiempo haciendo hincapié en este punto, pero es fundamental. Los consumidores están cada vez más concienciados y el hecho de utilizar materias primas respetuosas con el medio ambiente o de gestionar correctamente los residuos marca la diferencia a la hora de tomar una decisión de compra.
- Seguridad y trazabilidad: con el auge de las falsificaciones y el comercio a través de Internet, los envases y las etiquetas de los productos tienen el papel fundamental de servir como herramienta que garantice la seguridad. Los fabricantes de los productos y los de packaging y etiquetas tienen que unir fuerzas y diseñar envases y etiquetas inteligentes que garanticen la autenticidad de lo que compramos (con la inclusión de códigos o el uso de materiales exclusivos) y faciliten la trazabilidad.
- Información clara y transparente: el envase y la etiqueta debe mostrar los valores del producto de forma clara. Y cuando decimos “mostrar” nos referimos a que no vale con escribir en la etiqueta palabras como “natural”, “bueno” o “sano”, sino que el envase ha de reflejar esos valores. Producto, etiqueta y envase han de concebirse como una unidad que transmite el mismo mensaje.
- Minimalismo: el diseño sencillo, con líneas limpias y claras, está de moda, sobre todo en el mercado del lujo. Priman las figuras geométricas y las tipografías visibles, san serif.
- Creatividad y personalización: en el mundo del diseño la creatividad es fundamental. Un envase o una etiqueta con un diseño novedoso atrae la atención sobre cualquier producto. Y si ese diseño incluye elementos de personalización (gracias a la posibilidad de imprimir series cortas) el envase se convertirá en una poderosa herramienta de marketing.